Entre los árboles los toco y adel-
gazan su fiereza;
me perdonan su muerte no tan muertos,
no tan estúpidos
como las niñas blancas.
Entre los árboles los toco y eran
mi piel.
Al penetrar aquí y hallarlos mudos
me revelan despacio
que soy lo que son ellos,
que nacieron conmigo,
2 comentarios:
Feliz tarde de domingo, amiga Ogi.
Besos
Me gusta mucho leerlo a viva voz, gracias, tesoro, eres una maravilla.
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