
MANIQUÍES
Los grandes almacenes
de Amsterdam,
igual que Las Sierpes de Agua de Klimt.
En los escaparates,
las áureas cabelleras enmarcan
el óvalo endiosado de los rostros
que siguen con la vista
la ansiedad
de aquellos que retrasan la oficina
o el cuadrado de césped de su casa.
Detrás de los cristales,
las mujeres palmera
hacen imaginar otros países
de un baño de burbujas
después de reposar bajo su sombra,
después de haber comido de sus frutos.
Detrás de los cristales,
invitan a las manos de avaricia,
a ser hiedra de olor entre sus piernas
de cariátides y a no regresar
de las islas del mirto.
Alguien las ve mover, calmos, los brazos.
Más allá de la acera,
una avefría pisa los diamantes
y el cielo plomo
vierte un meteorito.
4 comentarios:
¡Bienvenida a la familia blogger!
Estoy segura de que estarás encantada aunque al principio, naturalmente, encontrarás que son complicadas las diferencias con tu anterior sistema.
¿No te ha ocurrido igual cuando has cambiado tu domicilio a otro barrio?
Y al poco tiempo ya lo sientes tuyo y estás feliz.
Abrazos, Ogi2 :-)
Aquí vendré a leerte. (Lo de los lunares verdes se me hace raro)
Un beso, Ogitwo
...y la que persevera en los versos dice: muy moderna te veo!
Gracias a todos por entrar en el nuevo blog
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