Casa I
No lo verías
sereno en la entrada y callado
pero lo sentirías.
Estás plantando las petunias
- azules.
El mediodía tiene un irse
del dolor;
su leve eternidad, almena
donde eres tan preciosa
con tus gestos, querida.
Luz en tu inclinarte a la tierra.
Estás plantando el terciopelo
sin enigmas.
Luz que no surge desde un bíblico
capricho
sino que burbujea
de ti y anega de esplendor
amoroso la tierra.
Él observaría tu espalda,
tu inclinarte sin miedo,
y no le urgiría un abrazo,
ese terciopelo
confiado.
Si estuvieras allí,
y si él,
y si la casa...
4 comentarios:
Creo que vos también estás plantando flores azules.
que bonito! como siempre...Besos!
Es una vida hermosa, con sus condicionales y sus condicionantes, pero hermosa. Como tu poesía.
kuko
las flores y su simbología del amor y la muerte. siempre me ha parecido extraño el hecho de que las flores coronan tanto al ser amado como al cadaver putrefacto. sin embargo, tu poema transmite bastante luz, con un dejo de tristeza en el uso de las imágenes.
saludos.
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